Bogotá, 29 jun (Reuters) – Colombia lanzará en septiembre proyectos para desarrollar la producción y el uso de hidrógeno como fuente de energía limpia a largo plazo, anunció el martes el ministro de Minas y Energía, Diego Mesa, quien además confió en que la subasta de petróleo y gas de este año sea exitosa.
El país sudamericano publicará una hoja de ruta para desarrollar durante los próximos 30 años la producción, uso y exportación de hidrógeno como fuente de energía limpia para su uso en el transporte y la industria, entre otros sectores, dijo Mesa en una entrevista con Reuters.
El funcionario aseguró que el plan recibirá una alta inversión, sin proporcionar detalles específicos, y Colombia ofrecería incentivos, incluidas deducciones fiscales, para fomentar la participación del sector privado.
La posición de Colombia como el sexto país con mayor cantidad de recursos hídricos renovables lo coloca en una posición ideal para producir hidrógeno verde, que se obtiene al dividir el agua, dijo Mesa, aunque también podrá producir hidrógeno azul, cuando el gas natural sea dividido en sus partes componentes.
«Colombia tiene todos los insumos para ser un líder regional y mundial para producción de hidrógeno», dijo el ministro, que reveló que se esperan inversiones en el incipiente sector del hidrógeno este año.
Los proyectos piloto para producir y usar hidrógeno deben comenzar en 2022, precisó Mesa.
La producción de petróleo y gas, y también de carbón, sigue siendo importante para los ingresos fiscales del país sudamericano.
Si bien el sector se vio gravemente afectado por el impacto en la demanda mundial provocado por la pandemia de coronavirus, Mesa dijo que confía en el éxito de la subasta de petróleo y gas de Colombia en 2021, en la que se ofrecerán unos 32 bloques.
«Esperamos que haya una asignación de unos entre 10 y 15 bloques», aseguró.
El ministro dijo además que la decisión del gigante minero anglo-suizo Glencore de comprar a sus socios Anglo American y BHP la participación en la mina de carbón Cerrejón fue una bendición para la industria carbonera de Colombia.
Aunque las comunidades indígenas de La Guajira, donde se encuentra Cerrejón, denuncian contaminación del agua, emisión de polvo, ruido y problemas de salud causados por la mina, Mesa aseguró que la decisión de Glencore garantizará empleos e inversiones.
«Para La Guajira, para el sector carbonero colombiano es un espaldarazo de confianza inversionista de que se acaba la incertidumbre con respecto a la principal mina de carbón térmico del país», declaró.
A pesar de que habló sobre Cerrejón con el director ejecutivo entrante de Glencore, Gary Nagle, Mesa dijo que no abordaron el tema de la minera de carbón Prodeco, la unidad colombiana de propiedad total de Glencore.
La Agencia Nacional de Minería de Colombia (ANM) anunció en abril que rechazó inicialmente una solicitud de Prodeco para devolver dos de sus concesiones en el país sudamericano.
«Hay que cumplir con compromisos para poder continuar con el proceso y pues es un tema que en este momento, como entenderás, está justamente en pleno proceso y hay que esperar que la autoridad minera se pronuncie al respecto», concluyó.