Los hechos:
- El Uribismo está vivo. Los candidatos uribistas Juan Manuel Santos, Germán Vargas y Noemí Sanín sumaron 8.866.590 votos. El 62,8%. Ese porcentaje después de 8 años de Gobierno demuestra que Alvaro Uribe y el Uribismo están intactos.
- La interferencia de Chavez & Cía. no importó. Santos ganó en todos los departamentos limítrofes a pesar de las amenazas de guerra proferidas desde Caracas.
- El “Todos contra Uribe, Todos contra Santos” montado por los candidatos rivales y apoyado por algunos columnistas y medios de comunicación tampoco funcionó. Los electores terminaron apoyando masivamente “al perseguido”.
- Los debates, especialmente los de la última semana, en donde hubo más protagonismo de los candidatos y sus propuestas, que de los periodistas y su parafernalia, jugaron un papel fundamental en los resultados finales.
- El Sindicato de Columnistas y Opinadores Antiuribistas volvió a perder como ya había perdido en 2002 y 2006. No aprenden que una cosa es lo que ellos ven desde sus mullidas oficinas de Bogotá y otra cosa la que ve el pueblo que se enfrenta todos los días al difícil ejercicio de sobrevivir.
- Son más agradecidos los pobres que los ricos. La mayor votación de Santos está en los estratos bajos.
- Perdió el Club de Ex-alcaldes. Y perdió en Bogotá y Medellín de donde fueron exitosos mandatarios Antanas Mockus (2 veces), Luis Eduardo Garzón, Enrique Peñalosa y Sergio Fajardo. Esa alianza fue bien vista hasta que la emprendió contra Alvaro Uribe.
- Germán Vargas tiene más votos que Cambio Radical. Santos más votos que el Partido de la U. Petro más votos que el Polo Democrático.
- En cambio, Rafael Pardo y Noemí Sanín tienen menos votos que sus Partidos. A los dos les correspondió el ingrato papel de sepultureros.
- Los vicepresidentes no aportaron votos salvo Angelino que evitó que Santos perdiera en el Valle de Cauca.
- Andrés Pastrana es un perdedor del que pocos hablan. Estuvo metido hasta el tuétano en la campaña de Noemí, puso a sus escuderos de confianza en la cúpula y de nada le sirvió.
- Las encuestadoras no cogieron ni la última. La única empresa que nunca se equivocó es Connecta del joven economista Tomás González.
Las Sorpresas:
- La falta de preparación de Mockus para el discurso posterior a las elecciones. La intervención del candidato verde sorprendió a todo el mundo porque se pareció más a la sesión de una secta que a la comunicación de un Presidente.
- La paliza que le dio el Partido de la U al Polo Democrático en Bogotá. La teoría del péndulo que muchos auguraban afectaría a la elección nacional empezó a tener efecto, pero en Bogotá.
Preguntas sueltas:
- ¿De quién eran los 10 puntos que Napoleón Franco le atribuyó en su sexta encuesta a los candidatos Araujo y Calderón para quitárselos en la séptima sin explicación alguna?
- ¿Será verdad que Lucho Garzón estaba borracho en el escenario mientras Mockus entregaba su improvisado parte de victoria?
- ¿Será que después de lo courrido en los últimos 10 días, volveremos a ver debates de los candidatos en TV?
- ¿Quién grabó el video de despedida de Noemí?
- ¿Enrique Peñosa estaba de cuerpo presente o era un avatar?