Millonarios con varias ausencias de sus titulares sacó adelante un partido que se estaba embolatando. Partido de trámite regular, el visitante hizo más en el primer tiempo y pudo propinar una goleada si se lo hubiera propuesto, ante un Caldas disminuido que regalaba espacios por doquier en medio campo y defensa. Moreno y Montero inquietaban a Henao. El local quiso sorprender, pero se quedó en eso, solo intenciones.
Otálvaro se echó el equipo al hombro y alimentó las opciones de gol, concretadas por Montero, Tancredi y Asprilla. Delgado, termina en buen nivel. Leudo lo intentó aunque no se ve cómodo todavía en el campo. Mosquera y Ochoa, unas de cal otras de arena. Zapata y González, aún requieren ganar más confianza y seguridad.
Es vergonzoso que hayan jugadores en el fútbol colombiano como Edwards Jiménez, experto en «payasadas y piscina» pues anda tirándose al piso en cualquier acción de juego para ganarse el favor arbitral.
Por el lado embajador, buena despedida de visitante y a la expectativa de los ajustes y refuerzos para la nueva temporada. Amanecerá y …..veremos.
Albiazul saludo,
Alberto Díaz
