Afidro aseguró que bajando los estándares de seguridad sanitaria para los colombianos, a través del decreto de biotecnológicos, se arriesga la salud de las personas y no habrá disminución de precios de estos medicamentos, porque según el mecanismo de precios establecido en Colombia, “todos los productos de un mismo principio activo (sustancia que trata la enfermedad) se les fija un precio igual”. Es decir, que el tan anunciado ahorro para el sistema no existiría y por el contrario, los “biolimbos” de mala calidad, tendrían el mismo precio que los originales. “Exponer a la población inerme a productos farmacéuticos sin las pruebas técnicas y científicamente recomendadas sería una irresponsabilidad contraria a todo valor constitucional y de derechos humanos. Lo que requiere el país son verdaderos medicamentos biosimilares y no productos de mala calidad que representen mayor grado de riesgo para los pacientes, aseguró Francisco de Paula Gómez, presidente del gremio.
